miércoles, 22 de mayo de 2013

Todas tus idas y venidas.

Cada vez que te acuerdas de que existo me da la vida, cada ve que te da por hablarme los siete días de la semana, cuando me dices enana y te ríes, cuando me sonríes o me dices alguna tontería. 
Solo con decir hola ya me alegras el día.
 Pero luego viene la mejor parte, sin duda es la que más me gusta, cuando pasas de mí después de una semana entera sabiendo que existo. Y lo haces cada vez que vienes, es un periodo tan corto de tiempo que ni me da tiempo a verlo.
Cada vez que lo haces se rompe algo dentro de mí, pero cuando vuelves, como una tonta, te dejo entrar de nuevo y ahí estás, una semana y ya vuelves a pasar de mí.
Pero como no se me da bien aprender, aquí estoy de nuevo, has vuelto a pasar de mí y ya no sé que hacer.
Gracias por quererme tanto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario